Ha vuelto pero ¿por cuánto tiempo?

Mia volvió al redil. Después de por lo menos.... 5 años decidió volver a hacer puzzle. Siempre la había relajado pero no sabía porque dejo de hacerlo. Comenzó toda emocionada a hacer el típico puzzle de 100 piezas. No parecía del todo difícil. A pesar de las complicaciones del dibujo estaba siendo capaz de unir varias piezas.

Había comenzado por el principio (como era lógico): el marco del puzzle, después el interior y finalmente lo más complicado. Estuvo varios días pero no la importaba, se estaba divirtiendo y lo echaba mucho de menos. Eran momentos de recogimiento, de no pensar, de no comerse la cabeza, de evadirse.

Al cabo de un par de días se dio cuenta de porque dejó de hacerlo a pesar de que la encantaba. Le faltaban piezas. Si. Ahora lo recordaba, en la mayoría de los puzzles que había intentado hacer se había encontrado con ese problema. Un par de piezas perdidas. ¿Dónde? No se sabe. Pero eso le había desilusionado hace años y ahora volvía a aparecer. Ese desasosiego de dejar algo inacabado, o de tener que dejarlo porque no había salida posible. Si no hay piezas no se puede acabar.

¡Una mierda! (si, así de claro).

Sentía como si hubiera perdido el tiempo haciendo algo que nunca iba a terminar. Inacabado. Pues que bien.

No sabia que hacer aunque nada lo iba a arreglar. ¿Cómo la podía encantar algo que tanto la hacía sufrir?

Ya ves, y todo por un par de piezas.

Pd: ¿se puede perder algo que nunca se tuvo o mejor dicho, nunca se supo (por no aceptar personalmente) que se tenía?